Salió a hombros con Víctor Cerrato
Viernes, 23 de septiembre de 2022. Segunda novillada de la Mini Feria de Azuqueca de Henares, Guadalajara. Media entrada novillos de Torrehandilla bien presentados.
Marcos Linares, que sustituyó a González Écija, Silencio y silencio.
Víctor Cerrato. Dos orejas y Silencio.
Miguel Andrades. Dos orejas y rabo y dos orejas .
Miguel Andrades, novillero gaditano, apoderado por José Otero, viene con la escoba para barrer a la competencia. Toreó con gusto en el saludo a la verónica. Banderilleo sin acierto destacando con el tercer par al quiebro. Comenzó la faena por alto a dos manos, con remates por abajo. Al novillo le costó humillar, salía con la cara por arriba después del muletazo. Miguel Andrés estuvo muy firme con el novillo, que fue perdiendo ritmo, en el último tramo se metió en las cercanías, intentando un circular y un desplante de rodillas. Fue cogido aparatosamente al entrar a matar, afortunadamente sin consecuencias. A continuación recetó una soberbia estocada. Cortó dos orejas y rabo.
Al sexto lo llevó al caballo con un galleo, volvió a colocar Banderillas, con ajuste y acierto,, clavando arriba, le pidieron otro par, clavó muy comprometido al quiebro y dio una vuelta al ruedo tras parear. No sobrado de fuerzas el de Torrehandilla, con las manos por delante, Miguel Andrés , trazó muletazos de buen trazo con la zurda, tendría que coger la distancia corta y tirar de desplantes para conseguir meter al público en la faena. Tras unas manoletinas al paso dejó media estocada. Teniendo que utilizar la cruceta. Cortó dos orejas.
Víctor Cerrato. Apenas pudo abrirse de capa en un escaso saludo . El de Torrehandilla noble, aunque muy limitado de fuerzas, faena construida sobre el pitón izquierdo, donde hubo series de muletazos templados llevando al novillo toreado, faena breve pero limpia. Tras una estocada caída. Petición y dos orejas.
El quinto, también de Torrehandilla, de escaso fondo, muy limitado, no le pudo obligar, perdía las manos , quedándose a mitad del muletazo, Cerrato puso voluntad. Fue arrollado sin consecuencias, lo despachó de una certera estocada en buen sitio. Fue silenciado.
El jabonero cuarto, limitado de fuerzas, con la cara a media altura, se derrumbó en los primeros muletazos, apenas le permitió hacer faena , un novillo noble sin poder se los fue robando de uno en uno sin que llegara la conexión en los tendidos. Pasó aliviandose en el primer encuentro para después dejar una estocada tendida. Teniendo que atronar. Fue silenciado.